Qué pasa cuando dejas de ir al gym y quieres regresar





Retomar la actividad física tras un tiempo de paro en tus entrenamientos, tiene consecuencias.

Imagínate que estás a punto de comenzar (o, en el peor de los casos, terminar) tus vacaciones o que simplemente te has tomado unos días sin pisar el gym. De ser así, debes conocer los inconvenientes de no haber entrenado. Si has cumplido con tus ejercicios, no hay problema, pero si te has saltado el entrenamiento, mira cómo reacciona tu cuerpo...

UNA BUENA SIESTA

El esfuerzo renovado después de un periodo de inactividad hace que tu cuerpo desee descansar inmediatamente para recuperarse. Por eso, no vuelvas al gimnasio por la mañana o te quedarás dormido en el trabajo.

LAS GLÁNDULAS TE HABLAN

El ejercicio hace que las glándulas de la adrenalina liberen en el flujo sanguíneo cortisol (la hormona del estrés) . Cuando uno retoma el ejercicio después de una larga pausa, libera más cortisol que de costumbre, cosa que puede hacer que se te inflamen las articulaciones. Es la forma que tiene el cuerpo de proteger las zonas que has forzado en exceso.

POR PIERNAS

Al día siguiente tendrás la sensación de que alguien te ha cortado las piernas con un cuchillo afilado. Levantar pesas hace que los músculos tengan que esforzarse tanto que realmente provoca desgarrones microscópicos en ellos. Mientras el cuerpo repara esos desperfectos, los músculos crecen y los huesos y el tejido se fortalecen.

RESPIRACIÓN ACELERADA

Los pulmones son como cualquier otro músculo: se vuelven más fuertes y grandes cuando practicas ejercicio (especialmente, cardiovascular). Pero una temporada sin ejercitarse los vuelve más débiles (a ellos y a los músculos que los sujetan, el diafragma y los intercostales). Eso significa que no podrás almacenar tanto oxígeno. Resultado: en un abrir y cerrar de ojos jadearás como un perro..

ARTICULACIONES ENGRASADAS

Si remoloneas en el sofá acabarás eliminando fluido sinoviál de las articulaciones. Al ejercitar las extremidades bombeas este fluido fuera de la membrana de la articulación, el sinovio engrasa el cartílago y consigue que la articulación se mueva con suavidad. En unas dos semanas tus articulaciones estarán menos agarrotadas.

EJERCICIO CEREBRAL

Cuando están inactivos, los enlaces neuronales entre el cerebro y los músculos se vuelven menos eficaces. Por eso tienes sensación de debilidad. Conforme entrenes, el cerebro se ira acostumbrando a decirle a tus músculos: "Sí, puedo conseguirlo".

DE TODO CORAZÓN

Después de un tiempo sin entrenar, tu corazón no puede bombear tanta sangre con cada contracción, pero los músculos siguen necesitando la misma. El corazón resuelve este dilema aumentando el número de latidos por minuto (el ritmo cardíaco) para que la sangre llegue a los lugares donde hace falta.

FUENTE: Men's Health




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