QUE NO SE CULPE A NADIE DE MI MUERTE: Una apología reflexiva sobre el suicidio





Intensa, reflexiva y con un toque de tragicomedia, es como estelariza Majo Pérez de una manera extraordinaria este personaje lleno de diversas personalidades y matices, lo cual es digno de aplaudir y reconocer su labor histriónica ya que podría ser difícil de interpretar mediante este corto pero profundo monologo, pero nos muestra su talento en su esplendor, escrito de una manera genial e inteligente por el talentoso dramaturgo Humberto Robles, con una excelente dirección y producción de Sergio Arroyo; los cuales en conjunto nos muestran en escena una joya interpretativa.

Fotografía por Charly Duchanoy ©

Como bien menciono, es un monólogo en el cual, una mujer está inmersa en una vorágine de sentimientos encontrados que la quieren llevar a tomar una difícil decisión como lo es suicidarse, debido a todo el contexto que ha vivido en el cuál lleva el peso social y moral de tener que cubrir las necesidades de alguien más, como lo son su familia principalmente anteponiéndolas antes que ella misma y su amor propio, a pesar de haber sido victima de abusos, discriminación y prejuicios sociales, todo ello contado a través, de la interpretación de 5 personajes fragmentados a lo largo del monólogo, los cuales han marcado la vida de la mujer, dando vida a esta historia trágica pero llena de humor, enmarcada por una supuesta llamada telefónica que espera y que la da esa esperanza de detener su suicidio.

Fotografía por Charly Duchanoy ©

En definitiva, es una obra que nos deja un mensaje bastante crudo pero real que nos hace reflexionar sobre que tan importantes debemos ser como personas y que no debemos anteponer a nada ni a nadie antes que nosotros, para ello debemos trabajar en nuestro autoestima pero sobretodo hay que resaltar que la obra llega en un momento crucial, ya que el suicidio ha sido en los últimos años uno de los principales problemas de salud pública, siendo una de las causas de muerte mas frecuentes entre los jóvenes, por lo tanto, valdría la pena ir a ver esta tragicomedia que nos deja esa reflexión y aprendizaje respecto al amor propio y que no debemos dejarnos llevar por los prejuicios morales y sociales antes que nuestra felicidad porque al final a nadie le va a importar tu persona mas que a ti mismo.

Fotografía por Charly Duchanoy ©

Esta puesta en escena se presenta en el teatro Ofelia todos los jueves a las 20:30 hrs. hasta el 30 de marzo, así que no se pueden perder esta gran obra y vayan cuanto antes por sus boletos que pueden adquirir directamente en taquillas o mediante ticketmaster.

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Fotografía por Charly Duchanoy ©

Por Juan Carlos Vega

para Boy4ME.com



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