Al momento de cuidar la dieta para evitar un aumento de peso siempre miramos lo que comemos y con frecuencia olvidamos lo que bebemos. Sin embargo, en los líquidos de tu dieta puede estar la clave para ver resultados pues a continuación te mostramos cómo pueden hacerte engordar las bebidas.

Bebidas, ¿más peligrosas que los alimentos?

Todos podríamos pensar que las bebidas pueden tener un impacto menor en nuestra dieta en comparación con lo que comemos, es decir, que los alimentos sólidos. Sin embargo, los líquidos pueden ser más peligrosos de lo que creemos.

En primer lugar, bebemos siempre que tenemos sed o para acompañar una comida y a diario deberíamos consumir tantos ml de líquido como calorías hay en la dieta, por lo que las bebidas deben estar presentes en nuestros días y en cantidades apreciables, más aun, en esta época del año.

Asimismo, las bebidas pueden ser fuente de nutrientes poco sanos y también, de muchas calorías que olvidamos tener en cuenta al momento de cuidar nuestra dieta. De hecho, la mayor parte de las bebidas con sabor, excepto las endulzadas artificialmente, tiene azúcares en exceso.

Incluso las bebidas más sanas a nuestro criterio pueden esconder azúcares y ser un foco de calorías poco considerado en nuestra dieta, tal es así que con un vaso de zumo de naranja podemos sumar hasta 20 gramos de azúcar y superar las recomendaciones de la OMS acerca de la ingesta de azúcares.

Las bebidas alcohólicas merecen una mención especial, pues no sólo aportan calorías derivadas del alcohol que puede favorecer el almacenamiento de grasas en el cuerposino que además, muchas poseen azúcares y por ello son gran fuente de calorías.

Como si fuera poco, se ha probado que a iguales nutrientes, los líquidos sacian menos que los sólidos, por ello, podemos beber gran cantidad de azúcar y calorías sin que nuestro cuerpo lo perciba realmente.

Por todas estas razones, las bebidas merecen nuestra atención, pues pueden ser más peligrosas que los alimentos de nuestra dieta.

Así de fácil puede hacerte engordar lo que bebes

Dado que el líquido es necesario en nuestra dieta y que éste no brinda saciedad como sí lo hacen los sólidos, muy fácilmente podemos beber azúcares y calorías en exceso sin darnos cuenta.

Si además bebemos infusiones con azúcar o consumimos más cantidad de zumos o refrescos, podemos beber hasta 1000 kcal diarias sin darnos cuenta.Si en un día habitual desayunamos con un vaso de zumo de naranja, bebemos junto a la comida un refresco azucarado y posteriormente nos refrescamos con un batido de frutas, entrenamos y consumimos una bebida deportiva y terminamos el día con una cena acompañada de dos copas de vino tinto, fácilmente nos excedemos en los azúcares y añadimos a la dieta más de 500 kcal sólo con estas bebidas.

Y si pensamos que con sólo 500 kcal menos cada día podemos perder peso, claramente podemos darnos cuenta que es muy fácil engordar con lo que bebemos.

Para evitar los azúcares y las calorías líquidas en exceso, no sólo debemos escoger como bebida habitual el agua, sino además, limitarnos en el consumo de alcohol e intentar no beber líquidos azucarados a diario y en cantidades superiores a un vaso por día.

A muchos les sorprenderá lo fácil que es engordar con las bebidas y por ello, de ahora en más sabemos que debemos prestar más atención a los líquidos de nuestra dieta al momento de mantener el peso o intentar perder kilos.